NEW YORK. - Al entrar en el 2025, ya sabemos dónde van a jugar varios agentes libres destacados, así como algunos jugadores notables que han sido cambiados este invierno en las Grandes Ligas.
El más destacado entre ellos, el dominicano Juan Soto, firmó un contrato récord de 15 años y $765 millones para mudarse del Bronx a Queens y vestir el uniforme de los Mets. Un bateador de élite con un ojo prácticamente inigualable en el plato, Soto se vio fantástico para los Yankees, campeones de la Liga Americana, tras un cambio con los Padres hace poco más de un año. Con apenas 26 años, podríamos verlo alcanzar nuevas alturas con su nuevo club en una carrera ya ilustre.
Otros jugadores estelares que estarán con nuevos equipos incluyen al dominicano Willy Adames (Gigantes) y Christian Walker (Astros). El poderoso primera base Pete Alonso sigue en el mercado mientras prueba las aguas de la agencia libre por primera vez después de seis años prolíficos con los Mets, durante los cuales conectó 226 vuelacercas. El antesalista Alex Bregman, dos veces convocado al Juego de Estrellas y dos veces campeón de la Serie Mundial con los Astros, también está en el mercado por primera vez.
En el frente de los lanzadores, el dos veces ganador del Premio Cy Young, Blake Snell, se unió a los Dodgers con un contrato de cinco años y 182 millones de dólares para fortalecer una rotación ya formidable que incluye a Ohtani, Yamamoto y Tyler Glasnow. Mientras tanto, el exganador del Premio Cy Young de la Liga Nacional, Corbin Burnes, sorprendió al mundo del béisbol al firmar un pacto de seis años y $210 millones con los rivales de los Dodgers en la División Oeste de la Liga Nacional, los D-backs. Y el zurdo Max Fried, dos veces convocado al Juego de Estrellas con promedio de carreras limpias de 3.07 en ocho campañas con los Bravos, vestirá el uniforme rayado de los Yankees tras acordar un contrato de ocho años y 218 millones de dólares con Nueva York, un récord para un lanzador zurdo.
Podríamos seguir viendo a más de las mayores estrellas del juego vistiendo nuevos uniformes en el 2025, y esto podría alterar aun más el balance de poder en las Grandes Ligas.